Por Lucero González
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Estamos muy acostumbrados a ejercitar a nuestros perros de manera física: los sacamos a caminar, correr, y hasta a escalar, pero en muy pocas ocasiones nos ponemos a pensar en sus necesidades mentales.

Una actividad mental es definida como “una función del cerebro que tiene como fin la resolución de problemas a partir de una problemática”. Aunque hay estudios que clasifican la inteligencia de los perros de acuerdo a su raza, no te preocupes por eso, un perro de cualquier raza o mezcla, es decir cualquiera, puede a aprender a utilizar su cerebro y resolver problemas, lo único que debes hacer es dedicar un poco de tiempo. Luego, él resolverá problemas por sí solo,  ya que lo acostumbraste a pensar.

No te compliques mucho, hay juegos que puedes diseñar en casa y no gastar mucho dinero, lo que sí debes saber es que cualquier juego mental debe ser enseñado de primera instancia, algunos juegos serán para cuando no estés en casa y otros solo podrás ocuparlos para cuando estés con él.

Busca…

Este es el mejor de los juegos, ya que no solo tiene que pensar sino que ejercita su principal sentido: el olfato. Primero tienes que enseñarle la palabra busca (o la que tú escojas), tira un premio al piso, que él te vea, y pide que busque. Repite esta acción varias veces hasta que tu perro entienda qué significa la palabra; luego ponlo más difícil, deja premios en algunos rincones de la casa y pídele que busque. Cuando los encuentre felicítalo mucho. Puedes complicarlo más al poner tubos de PVC y dentro de ellos colocar premios (si eres bueno para las artes manuales construye una base de madera para insertar los tubos, si no puedes clavarlos en el jardín de tu casa o en un área ajardinada, en el parque, camellón o lote baldío), el perro no solo tendrá que encontrarlos sino también tumbar los tubos para obtener el premio (solo ten cuidado que tu perro no le dé por morder y comer el tubo de PVC,) por ello lo primero que tienes que hacer es poner el tubo cuando estés y constatar que no lo come, ya que le puede hacer daño, si esto llegará a pasar hay otras soluciones, como usar tubos de cartón.  Una vez aprendido, puedes irte de casa y dejarle búsquedas en sitios donde no cause destrozos, él se entretendrá mucho, se cansará mentalmente y podrás evitar algunos destrozos en casa.

Saca el objeto

La finalidad de este juego es que tu perro aprenda a sacar premios de los objetos y puedes conseguirlos en veterinarias. Son juguetes a los que les puedes meter comida (fundamentalmente croquetas o trozos de premio como salchichas de pavo en trocitos muy pequeños dentro de ellos), pero también hay una forma de hacerlos en casa, con simples botellas de refresco de plástico o PET. Primero tienes que descartar alergias en tu perro, ya que algunos son alérgicos al plástico, y bueno también que no se coma la botella. Toma un envase y hazle diferentes hoyos donde quepa una croqueta (o lo que vayas a poner), el caso es que con el movimiento pueda salir este premio o croqueta, enséñele que la botella tiene estos premios dentro, es importante que sepas que este juego será divertido si tu lo haces divertido desde el principio, muchas veces he oído: “le dejo la botella o el juguete a mi perro y no lo pela”. La pregunta siguiente es: ¿le dedicaste tiempo a enseñarle como sacar los premios? Regularmente la respuesta es “no”; por ello dedícale tiempo: pon la botella y, al principio, ayúdale a sacar los premios, felicítalo mucho cuando él lo logre. Muchos perros al no poder sacar el premio se ven frustrados y dejan el juego, recuerda que para ellos estos juegos son un reto mental, debes enseñarlos a resolverlo y que sea divertido, lo que menos quieres es frustrar a tu compañero de juegos y que no disfrute jugar.

Por ello, si no puede sacar el premio, ayúdale, sácalo tú y cuando él recupere el premio, felicítalo mucho. Repite la acción hasta que él logre sacar el premio de la botella. Una vez aprendido lo puedes dejar en casa cuando salgas, será un juego muy entretenido.

Rompecabezas

En el mercado ya existen estos juguetes llamados rompecabezas. Estos juguetes consisten en que los perros resuelvan un problema para obtener un premio y son muy divertidos. Hacen pensar mucho a los perros, pero también los puedes hacer en casa, como el tapete oculta premios. El chiste de este juego es que el perro aprenda a desdoblar el tapete para obtener un premio. El tapete lo puedes comprar de algodón grueso o hacer con una jerga. Pones primero el premio en plano, el perro entiende que está el premio en esa textura, luego puedes doblar una esquina para que el perro lo desdoble y así, poco a poco, pon tu imaginación en práctica e inventa maneras de envolver el premio (en uno, dos, tres o cuatro dobleces), y verás que tu perro se divierte y tú también viéndolo cómo resuelve el problema, porque siempre lo hacen con lógica, con ingenio… o con maña; son increíbles, así podrás entender también las travesuras que encuentras a tu regreso a casa y que te parecían un misterio.

Hay juguetes más complejos donde el perro tiene que mover una palanca para luego sacar de un cajón un premio. Se oye complicado, pero si lo enseñas a pensar verás que resuelve este y otros problemas sin complicación.

¿Dónde quedo la bolita?

Hay también juegos de descarte y juegos para hacer en dúo. En éstos le enseñas a buscar y luego a descartar, es igual que el juego de “¿dónde quedo la bolita? Pones un premio bajo un recipiente cóncavo de plástico y en otros dos nada, le pides a tu perro que busque y que utilice su olfato. El chiste del juego es que él solito voltee la jícara que tiene el premio. Al principio le puedes dar una ayudadita indicándole dónde está el premio y que sepa que en los otros dos no hay nada, luego deja de ayudarle, y aliéntalo a que lo resuelva solo.

El enseñar a tus perros a pensar y a resolver problemas en forma de juego tiene muchas ventajas, la primera es que no será tan ansioso en casa, ya que tiene trabajo qué hacer. Imagínate a tu amigo peludo en casa  toda la tarde sin nada qué hacer, seguro se aburre y jugará con lo que tiene a la mano, sillas y sillones de la casa, alfombras, almohadas, zapatos, ropa, las posibilidades son infinitas. Pero lo ideal es que se divierta con sus juguetes y sus juegos y no con tus cosas, así que le puedes dejar estos juguetes interactivos que desafían su mente cuando te vas.

Otra ventaja es que tu perro se volverá más seguro ya que sabe que puede resolver problemas, y eso lo ayuda con su autoestima. El fortalecer su autoestima, puede también ayudarlo a vencer miedos, sobre todo cuando son perros inseguros. Pero la principal súper ventaja es que tu perro se divierte.

Como vez, tiene muchos beneficios el  hacer pensar a nuestros amigos peludos, no lo dudes e inténtalo, no debe importarte la edad ni la raza, tienes que saber que todos aprenden a pensar. Cierto es que algunos necesitarán más de tu ayuda que otros, pero al fin del día todos lo logran. Ten confianza en él y en ti.  No dudes que tu perro puede pensar, lo vez todos los días, piensan cómo sacar la basura del bote, piensan en cómo sacar la borra de los cojines, pero mejor ponlos a pensar en cómo resuelven problemas jugando y que no jueguen destruyendo tu casa.